El
voleibol sentado es una variante del voleibol convencional dirigido a todas
aquellas personas que poseen alguna discapacidad. Por ello, es considerado como
un deporte paralímpico y se juega con la pelvis en contacto con el suelo.
El
voleibol sentado surge como evolución de un deporte que se conocía como “sitzball”. Se mezclaron las normas de
este juego junto con las del voleibol convencional y como fruto de esta fusión
surgió el voleibol sentado.
Antes del
voleibol sentado sí existía el voleibol paralímpico, pero con la peculiaridad
de que se jugaba en pie. No sería hasta 1980 cuando aparecería el voleibol
sentado. Sin embargo, es importante señalar que en 1980 solo jugaban este tipo
de voleibol los hombres, las mujeres no lo practicarían oficialmente como
deporte paralímpico hasta el año 2004. Y justo en este mismo año la versión
del voleibol en pie como deporte paralímpico desapareció.
Las normas
del voleibol sentado son exactamente las mismas que las del voleibol
convencional. Cada equipo se compone de 12 jugadores, siendo 6 los que están en
el campo. A su vez, de esos 12 jugadores solo puede haber como máximo 2 que
tengan “inhabilidad mínima” y de esos dos solo uno puede estar jugando dentro
del campo.
A pesar de
que se juega igual que el voleibol convencional encontramos algunas diferencias
como que el campo es más pequeño (10 mx 6 m), la red tiene 6,50-7 m de largo y
0,80 de ancho y que la posición del jugador no es marcada por los pies sino por
los glúteos del jugador.
Información documentada en Sportregras.
Fuente: Youtube(Conadexm) publicado el 14 de Agosto de 2015
Comentarios
Publicar un comentario